Escándalo en Diputados
El oficialismo, en minoría, no alcanzó el quorum en el recinto: llegó a reunir solo 123 legisladores con el apoyo de sus aliados del interbloque Provincias Unidas.
Después del fracaso de la sesión anterior, en la que el oficialismo no pudo reelegir a Cecilia Moreau como presidenta de la Cámara de Diputados, el Frente de Todos se tomó revancha y, con el apoyo de un sector del interbloque Federal y de la izquierda, lograron alcanzar el quorum en el recinto para debatir la creación de nueve universidades nacionales.
Sin embargo, y tras un escándalo que incluyó gritos y acusaciones, la sesión se cayó y la discusión fracasó, en lo que significó un doble revés para la bancada oficialista.
En medio de los gritos de los diputados de Juntos por el Cambio, el oficialismo festejó como un triunfo el quorum conseguido en el recinto.
Juntos por el Cambio, el principal espacio opositor, no bajó al recinto y advirtió, a los gritos, que la sesión es inválida: indicó que el oficialismo postergó en dos oportunidades el inicio del debate sin respetar el reglamento del cuerpo. Moreau hizo caso omiso a sus reclamos y continuó la sesión.
Mario Raúl Negri@marioraulnegri:
“¡Pedimos la palabra!”, vociferaron los diputados Cristian Ritondo, de Pro, y Juan López, de la Coalición Cívica. Moreau los ignoró. Karina Banfi, del radicalismo, junto a Maximiliano Ferraro, de la Coalición Cívica, empezaron a golpear las bancas. El escándalo era mayúsculo: el recinto quedó dominado por los gritos y los abucheos.
Moreau hacía intentos por mostrarse tranquila en su sitial de presidenta y mantenerse indiferente a la bronca de los diputados de Juntos por el Cambio. “Está muy colorado señor diputado, le va a hacer mal a la salud”, le advirtió, en tono de chicana, al diputado Ritondo, fuera de sí. “Diputado Negri, yo no sé cómo trata a su mujer, a mí no“, le advirtió al diputado cordobés. Negri pidió la palabra. Fue en vano.
Espíritus enardecidos
“Vos ya perdiste toda autoridad”, le advirtió. A coro, los diputados de Juntos por el Cambio gritaban: ¡Ilegal! mientras colgaban carteles en las bancas con la frase “impunidad o justicia”.
El oficialismo, en minoría, no alcanzó el quorum en el recinto: llegó a reunir solo 123 legisladores con el apoyo de sus aliados del interbloque Provincias Unidas. Cecilia Moreau, sentada en una banca en el recinto, esperaba en vano. La secretaria parlamentaria, Paula Penacca, se movía nerviosamente por el recinto. La tensión era palpable.
Nunca en la historia parlamentaria reciente se registró un hecho de esta naturaleza en una sesión preparatoria.
Con la ausencia de la oposición y la indefinición, Moreau no logró ser reelegida aunque, en virtud del artículo 37 del reglamento de la Cámara, continuará en el desempeño de sus funciones hasta que se convoque a una nueva sesión preparatoria.
Indignados
El desplante opositor se explica por la decisión de Moreau de suspender, sin plazo, la designación de los diputados Rodolfo Tailhade y Vanesa Siley, del Frente de Todos, de Alvaro González, de Pro, y de la radical Roxana Reyes como representantes ante el Consejo de la Magistratura.
Juntos por el Cambio reaccionó indignado y acusó a Moreau de “abuso de poder” al tiempo que tildó de “ilegal” su decisión. No solo no la apoyará como presidenta del cuerpo sino que amenaza con ir más allá.
“Si el oficialismo decide seguir las órdenes de Cristina Kirchner para obstaculizar el funcionamiento del Consejo de la Magistratura, nosotros no vamos a dar quorum en las reuniones de comisión ni en el recinto de la Cámara de Diputados”, advierten en el principal bloque opositor.
En conferencia de prensa, los jefes de bloque de Juntos por el Cambio embistieron contra Moreau. “La presidenta de la Cámara tomó una resolución contraria a Derecho, que fue retrotraer la designación de los miembros de Diputados en el Consejo de la Magistratura. Este es un hecho de extrema gravedad.
Por su parte, el jefe del bloque de Pro, Cristian Ritondo, le reclamó al oficialismo que retire la resolución por la que se suspende la designación de los consejeros por la Cámara baja. “El oficialismo debe reflexionar, esperamos que saque la resolucion para seguir la vida institucional normal”, enfatizó.
Desde el interbloque
En conferencia de prensa, el interbloque Federal, en la voz de su titular Alejandro “Topo” Rodríguez marcó distancia del conflicto entre el Frente de Todos y Juntos por el Cambio. “Instamos a que los dos grandes bloques dejen sus riñas y se aboquen al tratamiento de las leyes que necesita la sociedad.
“Siempre hemos planteado límites a las arbitrariedades institucionales, como cuando fue el intento de expropiación de Vicentin. Tampoco vamos a avalar iniciativas que procuren toquetear la composición de la Corte Suprema”, enfatizó Rodríguez, quien admitió sentirse “harto” de que los dos frentes mayoritarios “sigan judicializando la política”.
El malestar del Frente de Todos, una vez caída la sesión, era indisimulable. “Acá hubo una clara maniobra por entorpecer e impedir el funcionamiento de la Cámara de Diputados -reprochó el jefe de la bancada, Germán Martínez-. Queremos expresar nuestro repudio absoluto a la actitud tomada por Juntos por el Cambio y otros bloques al impedir que hoy se pueda constituir el quorum necesario para dar continuidad al actual esquema de autoridades. Esto es de una gravedad institucional enorme, inédita”(VW).
Con datos de la agencia DIB