En el Día Nacional de la Memoria se recordó los 46 años del golpe militar, la dictadura más cruenta
Con marchas en diversas ciudades del interior, la Campora y las agrupaciones de izquierda coparon la jornada. El presidente Fernández recordó la fecha en una acto que se realizó en el Auditorio del Centro Cultural de la Ciencia, en el Polo Tecnológico.
La jornada que recordó este jueves los 46 años del golpe militar que dio origen a la dictadura más cruenta del siglo XX y que debió constituirse en una acto de todos los argentinos fue monopolizado por las organizaciones de izquierda, movimientos sociales y La Campora, que terminó haciendo de la fecha histórica un acto político.
La marcha de esta agrupación política que reúne en su seno al kirchnerismo más duro y convocó a la mayoría de los intendentes y funcionarios peronistas de la provincia de Buenos Aires, buscó enviar al presidente Alberto Fernández un mensaje.
La militancia camporista marcho entre la Ex ESMA y la Plaza de Mayo y dejó varias imágenes políticas significativas, como la que muestra a Máximo Kirchner, el líder de esa organización junto al gobernador Axel Kicillof , junto a jefe de Gabinete bonaerense, Martín Insaurralde, el intendente de Lomas de Zamora en uso de licencia.
Fue un mensaje de cercanía política entre ambos como hace tiempo que no se daba, en una movilización central para la identidad política del kirchnerismo, que fue apoyada, además, por la vicepresidenta Cristina Fernández.
El encuentro, además, se dio en paralelo a otro acto, el que encabezó el presidente Alberto Fernández en el Ministerio de Ciencias.
Pero lo central fue la presencia de Kirchner, Kicillof y una nutrida lista de intendentes del Conurbano en la columna de La Cámpora y, no en el acto que encabezó el presidente Alberto Fernández (ver aparte) en el auditorio del Centro Cultural de la Ciencia, en el que homenajeó a científicos desaparecido junto al ministro el área, Daniel Filmus, y a la titular del Conicet, Ana María Franchi.
El Presidente apareció así en un marco no multitudinario, rodeado de sus más fieles y alejados del sector kirchnerista del oficialismo.
En ese acto, se vieron fisuras, porque mientras Fernández apeló a un gesto más conciliador al señalar que el 24 “no encuentra más unidos que nunca”, su propio secretario de Derechos Humanos, Horacio Pietragalla, cercano a La Cámpora, centró su discurso en ese acto en las consecuencias económicas de la dictadura, un tema sensible en medio de las discusiones sobre el acuerdo con el FMI y las medidas anti inflación.
Máximo Kirchner, que marchó detrás de una enorme bandera que pedía “independencia económica” dijo que “lo que tenemos que entender es que cuando la gente está dentro de un gobierno lo malo es menos malo y lo bueno más bueno, cuando la gente está adentro un gobierno es mejor”.
Fueron sus primeras palabras públicas después de renunciar a la presidenta del bloque de Diputados del Frente de Todos como una señal de rechazo al acuerdo con el FMI.
Andrés “Cuervo” Larroque, por su parte, fue más duro: recordó que Alberto Fernández fue “jefe de campaña” del actual diputado opositor Florencio Randazzo consideró que “es el Presidente el que tiene que convocarnos” a una mesa de diálogo político para limar asperezas en el oficialismo.
La fecha fue establecida en el año 2002 por Ley de la Nación 25.633, cuyo artículo 1º establece: “Institúyase el 24 de marzo como Día Nacional de la Memoria por la Verdad y la Justicia en conmemoración de quienes resultaron víctimas del proceso iniciado en esa fecha del año 1976(VW)