El Gobierno anunció el Servicio Cívico para jóvenes que no trabajan ni estudian
Se trata de un proyecto que Patricia Bullrich implementó en 2019 y que se pondrá en marcha en once ciudades del país. Será voluntario, aclaró el Gobierno. También habrá cambios en el régimen penitenciario federal.
La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich anunció el regreso del Servicio Cívico en once ciudades argentinas, destinado a jóvenes de 18 a 24 años que no trabajan ni estudian, con el cual se buscará entregarle a ese universo de personas “herramientas y capacitación laboral y educativa”.
Se trata de un programa que ya la funcionaria implementó en 2019 durante su paso por esa cartera. “Vamos a sacar a los jóvenes de las calles y alejarlos del delito y la droga. A todos los jóvenes de 18 a 24 años que no trabajan ni estudian, los vamos a convocar para brindarles formación en disciplina, respeto y valores”, señaló Bullrich en la red social X en un video junto a la ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello.
Según se informó oficialmente, «el servicio cívico» estará a cargo de Gendarmería, “Este programa ofrece talleres de formación que culminan con certificaciones reconocidas, brindando herramientas para la inserción laboral o la finalización de estudios”, señalaron.
Los participantes serán convocados por la Subsecretaría de Empleo y Formación Laboral, priorizando la proximidad a las sedes del Ministerio de Seguridad.
“Al finalizar, se evaluarán los perfiles para orientar a cada joven hacia oportunidades laborales o educativas, promoviendo la libertad individual y la superación personal”, relata el comunicado.
Trabajo para presos
Unas horas después de anunciar la vuelta del servicio cívico, la ministra Bullrich firmó la Resolución 1346/2024, con la cual estableció la obligatoriedad «para todos los internos alojados en el Servicio Penitenciario Federal» de cumplir tareas de mantenimiento e higiene en las cárceles.
Según se explica en la norma, este trabajo no será remunerado y deberá cumplirse durante 5 horas por día. La idea es que los presos cumplan estas tareas porque «la ociosidad de los internos conlleva al aumento ostensible de los índices de violencia y alteraciones al orden». (VW)