Libros de la polémica: Diputados libertarios pidieron la renuncia de Sileoni
Se trata de los libros de ESI distribuidos por Sileoni en escuelas secundarias. Diputados libertarios llevaron el tema a la Legislatura y pidieron la renuncia del titular de Educación bonaerense. “Kicillof debería echarlo”, dijeron.
Durante la última sesión de la Cámara baja de la provincia de Buenos Aires que tuvo lugar ayer martes, un grupo de diputados libertarios se pronunciaron sobre la polémica por los libros de literatura distribuidos en escuelas secundarias a través del programa “Identidades Bonaerenses”, a causa de su contenido sexual “explícito con escenas de violencia” y pidieron una pronta intervención del Gobierno bonaerense.
En ese contexto, el presidente del bloque de La Libertad Avanza (LLA), Agustín Romo, y su par del unibloque Libre, Guillermo Castello, manifestaron su malestar por la falta de tratamiento a los proyectos que presentaron ambos espacios en pos de que el Ejecutivo bonaerense de explicaciones sobre los libros distribuidos en las escuelas de la provincia de Buenos Aires, informó Diputados Bonaerenses.
“Si no renuncia (el Director de Cultura y Educación, Alberto Sileoni), el gobernador (de la provincia de Buenos Aires, Axel) Kicillof debería echarlo, porque si no sería cómplice de algo que para mí me parece profundamente, pero profundamente degenerado”, fustigó Romo, y aclaró que desde La Libertad Avanza están a favor de la educación sexual “siempre en un marco científico”.
En este sentido, el diputado bonaerense agregó que en la actualidad, la Dirección de Cultura y Educación incluye en el “ítem integral, cuestiones que nada tienen que ver con la ciencia, como por ejemplo, que hay 3 millones de géneros, que una persona puede cambiar de sexo, algo que es imposible biológicamente”.
Vale precisar que, los diputados que integran el bloque de La Libertad Avanza en la Cámara baja bonaerense presentaron un pedido de informes dirigido a la Dirección de Cultura y Educación en el que reclamaron conocer los fundamentos pedagógicos de la inclusión de algunos títulos en los libros distribuidos en bibliotecas de gestión estatal del nivel secundario en el marco de la Ley de Educación Sexual Integral (ESI).
Momentos antes de la participación de Romo, otro de los legisladores que se hizo eco de la controversia desatada por los libros de ESI, fue Guillermo Castello que elevó un pedido de informes para que Sileoni explique quienes fueron los funcionarios que aprobaron la distribución de los materiales y cuál fue el criterio de selección de los mismos.
“Esto está en las bibliotecas de las escuelas, está en las bibliotecas populares y está financiado y distribuido por el Gobierno de la Provincia, entonces a mí me surgen un montón de preguntas. Es una pena que el resto de los diputados no acompañe porque las preguntas están y nadie las responde”, lanzó Castello en relación a la negativa de los legisladores por dar lugar al proyecto presentado por el ala libertaria.
Según Castello, hay que cuestionar si la lectura de estos materiales afectan el desarrollo de una sexualidad saludable o interfieren en el proceso de elección sobre aspectos de identidad y conducta sexual en los adolescentes, y afirmó que Sileoni “naturaliza” la circulación contenidos en declaraciones públicas, justificándolos como “escenas pedagógicas” y “acciones educativas” que, según el legislador libertario, se presentan de manera trivial.
Para el diputado, existe una “fijación” Sileoni con la educación sexual, mientras que aspectos críticos del aprendizaje, como lengua y matemática, quedan relegados en un segundo plano.
Finalmente, el titular del monobloque libertario, lanzó una dura acusación y una interpelación a los demás diputados presentes en el recinto legislativo. “Yo me pregunto si no es una forma de corrupción de menores lo que está haciendo el Gobierno en cabeza del Ministro de Educación y le pregunto al resto de los colegas ¿Ustedes les comprarían estos libros a sus hijos? Me pregunto por qué se lo estamos tratando de imponer al resto de los padres y al resto de los chicos de la provincia de Buenos Aires”.
La semana pasada, integrantes del bloque de La Libertad Avanza (LLA) presentaron un pedido de informes a la Dirección de Cultura y Educación, dirigida por Alberto Sileoni con el objetivo de conocer los fundamentos pedagógicos de la inclusión de ciertos títulos en los libros distribuidos en bibliotecas de gestión estatal en las escuelas secundarias.
En particular, los diputados demandaron detalles sobre si se realizaron estudios de impacto pedagógico, psicológico o social relacionados con las obras seleccionadas para el programa “Identidades Bonaerenses”, además de consultar a expertos en psicopedagogía y psicología infantil.
Asimismo, los legisladores libertarios requirieron que se detalle en qué establecimientos educativos se distribuyeron los textos del programa y si se brindaron capacitaciones o guías específicas a los docentes para tratar los temas sensibles incluidos en los libros. En los fundamentos del proyecto, señalaron que algunos de los textos seleccionados, como Las Primas y Si no fueras tan niña, han sido cuestionados por su enfoque y contenido explícito que podrían afectar la salud emocional de los estudiantes si no se contextualizan ni se supervisan adecuadamente.
Además, el bloque UCR + Cambio Federal presentó un pedido similar, solicitando al Ejecutivo bonaerense que aclare los detalles administrativos de la distribución de los libros con contenido explícito, a la vez que pidieron conocer la guía educativa asociada.
El bloque radical también destacó la importancia de la educación sexual integral, pero cuestionó si los materiales seleccionados, que incluyen escenas de sexo explícito y lenguaje fuerte, son adecuados para los estudiantes. Los legisladores argumentaron que, dada la trascendencia del tema, es necesario un análisis más detallado sobre la pertinencia de estos libros en el ámbito escolar. Este reclamo se suma al de las bancadas del PRO, Libre y LLA, que también exigen explicaciones sobre la inclusión de los títulos en el programa educativo.
Finalmente, el debate sobre el contenido de los libros tomó un giro más polémico cuando se mencionaron las novelas Cometierra de Dolores Reyes y Las aventuras de la China Iron de Gabriela Cabezón Cámara, que incluyen descripciones explícitas de sexo. La cartera de Educación, a cargo de Alberto Sileoni, defendió el programa, explicando que la colección busca transformar la lectura en una ocasión de reflexión colectiva.
Según el funcionario de Kicillof, los libros incluyen guías detalladas y están dirigidos a estudiantes de diferentes edades, con sugerencias y acompañamiento docente para abordar las temáticas complejas de forma responsable. (VW)
