Plan 1.000 Cuadras: El proyecto de Alak implica que los vecinos tengan que pagar el asfalto
El intendente Julio Alak presentó el programa para asfaltar 1000 cuadras que deberían pagar los vecinos. Cada cuadra costaría 70 millones de pesos. Fuerte polémica y rechazo opositor.
El Concejo Deliberante de La Plata tuvo ayer un debate formal por el proyecto de ordenanza del “Plan 1.000 Cuadras” que envió Julio Alak para la realización de obras de infraestructura en el municipio, y que tiene la particularidad de que deberán ser pagadas por los vecinos, tal como pedía Javier Milei.
Según estipula el artículo 3° del proyecto enviado por Alak, «el costo de las obras que se ejecuten en el Plan 1000 cuadras, aprobado por la presente Ordenanza, así como también el proyecto, la dirección técnica, los accesorios para su funcionamiento, los trabajos complementarios y/o las variaciones de costos que pudieran corresponder, serán de pago obligatorio para los propietarios o poseedores a título de dueño, de los inmuebles beneficiados«.
La iniciativa despertó una fuerte polémica y el rechazo opositor a la decisión de que el pago sea obligatorio para los vecinos frentistas.
Según lo informado por el secretario de Servicios Públicos del Municipio Sergio Resa, a los concejales que participaron de la reunión informativa, las sumas podrían ascender hasta 70 millones de pesos por cuadra.
Dependiendo los frentistas de cada cuadra se hará un prorrateo por frente, por zona, o por frente y zona. En un hipotético caso de 30 frentistas idénticos, que abonen el 95 por ciento del valor de la obra, a cada propietario le corresponderían 2.2 millones de pesos a abonar en hasta 24 cuotas mensuales de 92 mil pesos.
Sin la aprobación de la ordenanza, los números aún están en el aire. Pero las referencias llevan el costo de pavimentar una calle a cifras similares. Una reciente licitación en Bahía Blanca arrojó un costo por cuadra de 64 millones de pesos para la realización de base, sub base y riego de imprimación, carpeta de asfalto, cordón cuneta y badenes.
El conflicto se podría presentar en los casos donde no haya un cien por ciento de adhesión. Es que, según estipula la Ordenanza General N°165 que reglamenta la ejecución de obra pública en los municipios bonaerenses, en el caso de las obras por contrato directo entre vecinos y empresas constructoras, alcanza con un 70 por ciento de adhesión propietaria de frentistas. El treinta por ciento restante igual debe pagar la construcción, y allí es donde los concejales del PRO manifestaron su preocupación.
Pese a que los montos son elevados, el Municipio también incluyó un artículo donde a través de la Secretaría de Hacienda y Finanzas, se podrá evaluar los casos que requieran un análisis particularizado y mediante acto administrativo fundado podrá establecer otro plan de pagos, «tanto para los beneficiarios adherentes como para los no adherentes».
El PRO manifestó su rechazo, pero en otros sectores de la oposición no pusieron tantas objeciones.
Lo llamativo es que, en un contexto de crisis económica y social denunciada a diario por la gestión de Axel Kicillof de la que formaba parte Julio Alak, el intendente decida avanzar con esta iniciativa a cuenta de los vecinos, quienes ya dejaron quejas a través de las redes sociales al enterarse de la hipotética suma que deberían abonar. (VW)