Qué es la “estanflación” de la que habla Javier Milei
En términos generales es la combinación de falta de crecimiento y suba generalizada y sostenida de precios. En Argentina se dio por primera vez en 1978 y se repitió 15 veces desde entonces.
El presidente electo, Javier Milei, explicó que en los primeros meses de su gobierno habrá alta inflación con estancamiento económico a partir de las medidas de ajuste fiscal que deberá implementar, y se refirió a la “estanflación”, un concepto que se hizo viral en las últimas horas.
Mieli explicó cómo será la economía del país en los próximos meses y habló de estanflación, que es la unión de los términos estancamiento del crecimiento e inflación, y es el vocablo que se usa para describir los períodos en que ambos fenómenos se dan en simultáneo.
“Va a haber una estanflación, porque cuando hagas el reordenamiento fiscal eso va a impactar negativamente en la actividad económica”, afirmó el futuro mandatario en declaraciones radiales.
A raíz de este escenario, Milei subrayó: “Por eso la única billetera que va a estar abierta es la de Capital Humano para dar contención a los caídos”.
Milei afirmó que la inflación de los próximos meses “ya está jugada” porque la política monetaria tiene un rezago de 18 a 24 meses” y es la consecuencia “de lo que se hizo en los últimos meses”.
A la vez, insistió en que ese es el período (de aproximadamente 2 años) que cree demandará la estabilización de precios, y en ese sentido afirmó que “está preparando un paquete de medidas” con ese objetivo.
“Estamos creando todos los mecanismos para detener la emisión de dinero, para que en un lapso de entre 18 a 24 meses terminar con la inflación. Esa es la evidencia empírica del caso argentino. La convertibilidad, que funcionaba bajo esa misma regla, tardó 20 meses”, recordó.
Qué es la estanflación:
Se trata de una situación de difícil gestión para los gobiernos, ya que las políticas económicas que pueden ayudar a combatir la inflación, como la subida de los tipos de interés, pueden agravar el estancamiento económico. Y a la vez, las políticas económicas que pueden ayudar a reactivar la economía, como el aumento del gasto público, pueden agravar la inflación.
Puede producirse por diferentes causas, entre las que se encontrarían:
- Shocks externos, como una guerra o una crisis financiera.
- Errores de política económica, como una política monetaria demasiado expansiva, o una política fiscal demasiado restrictiva.
- Cambios estructurales en la economía, como la globalización o la automatización.
Los efectos de la estanflación:
- Disminución del nivel de vida, ya que la inflación erosiona el poder adquisitivo de los ciudadanos.
- Aumento del desempleo, ya que el estancamiento económico genera dificultades para crear puestos de trabajo.
- Pérdida de confianza en la economía, lo que puede dificultar la inversión y el crecimiento económico.
Un poco de historia:
El término surgió casi por casualidad, en medio de una exposición del ministro de Finanzas británico Ian MacLeod en la Cámara de los Comunes, el 17 de noviembre de 1965.
En la Argentina, el primer año de estanflación nítida fue 1976, en el inicio de la dictadura de Jorge Rafael Videla, con un PBI que cayó 2% en medio de una inflación de más del 400%, aunque podría tomarse el antecedente de la segunda mitad del año anterior, durante la presidencia de María Estela Martínez de Perón, con la aplicación de lo que posteriormente se conoció como “rodrigazo” (por Celestino Rodrigo, ministro de Economía del 2 de junio al 17 de julio de ese año).
Las cifras de 1975 muestran una inflación del 182% y un PBI que no tuvo variación respecto del precedente, aunque con una caída en los últimos dos trimestres.
La combinación de inflación y estancamiento económico volvió a registrarse en 1978, 1981 y 1982, y marcó el piso desde que se iniciaron los gobiernos democráticos que se sucedieron a la dictadura, a partir de 1983.
El Plan Austral de 1985 procuró poner fin a la continuidad del tándem, aunque no pudo evitar que ese año la inflación se ubicara en un 385% y la economía registrara un descenso del 7%.
El presidente Raúl Alfonsín y su ministro Juan Sourrouille debieron esperar al año siguiente para mostrar estadísticas mejores, en un alivio parcial que quedó trunco en 1988 (-2% de evolución del PBI y 387,7% de inflación) y se expresó con virulencia al año siguiente, con una hiperinflación de cuatro dígitos con una economía que tuvo una caída del 7%, performance que, con menor intensidad, se repitió en 1990, ya con Carlos Menem en la Casa Rosada.
El dúo hizo su regreso en 2002, con el peor registro en lo que se refiere a la evolución del PBI (-10,9%) y una inflación del 40,9%, concentrada en los primeros meses del año.
Desde entonces, la coexistencia de las dos variables volvió a darse en 2009, 2012, 2014, 2016, 2018, 2019 y 2020, de lo que se desprende que la estanflación estuvo presente en la Argentina en por lo menos 16 de los últimos 48 años.
En la actualidad, hay algunos economistas que consideran que la economía mundial podría estar entrando en una fase de estanflación, debido a la combinación de factores como la guerra en Ucrania, la subida de los precios de la energía y la subida de los tipos de interés. (VW)