Argentina frente a una nueva encrucijada
A partir del resultado de las elecciones de este domingo 22 de octubre, nuestro país se enfrenta a dos modelos diferentes. Uno de ellos será el que regirá nuestros destinos en los próximos cuatro años.
Si hay un aspecto que nunca se agotará entre los argentinos, es la capacidad de asombro y, así quedó demostrado, una vez más, con los resultados de las elecciones generales que se concretaron este domingo, que posicionó como ganador en primer lugar, al ministro de Economía y candidato a la Presidencia, Sergio Massa.
En esta oportunidad lo hizo a través de Unión por la Patria (UP), una alianza integrada por varias vertientes del peronismo, junto a otras agrupaciones políticas, fuerzas de izquierda y con el apoyo de la mayoría de los gremios que hoy forman parte de la Confederación General del Trabajo (CGT).
Contra todas las expectativas esperadas, los resultados fueron para el asombro, porque en medio de una economía que cruje por todos lados, con una inflación que llegará a fines de año, según las proyecciones, al 142% , con precios de alimentos que no paran de subir y ajustes en las tarifas de servicios, sumado a los aumentos del combustible previstos hasta fines de año, Sergio Massa aparece hoy con grandes posibilidades de ser el próximo presidente de los argentinos.
Los datos duros no dejaron lugar a dudas, porque cuando todos los analistas ubicaban al candidato del oficialismo, Sergio Massa (36,68%), quien sumó más de 2 millones de votos, mientras que en segundo lugar, se ubicó Javier Milei, LLA (29,98% en la pole position y, la candidata de Juntos por el Cambio, Patricia Bullrich (23,83%, peleando el segundo lugar, con el 98,57% de las mesas escrutadas, (según Resultados.Gov.ar), el resultado final, sorprendió a propios y ajenos.
Las causas de este vuelco del electorado son diversas, según el cristal con el que se las mire. Por mencionar algunos de estos factores, el primer dato es que todo el peronismo se encolumnó detrás de Massa, pese a la situación económica de la Argentina y las grandes diferencias internas del oficialismo y los casos de corrupción que se conocieron en las últimas semanas.
Primó el discurso del miedo, (te van a sacar los subsidios, van a privatizar los servicios públicos, una educación para pocos, mínimas prestaciones de la salud pública), etc.
También hicieron lo suyo las medidas económicas recientemente implementadas como «el plan platita», refuerzos para los planes sociales o para los jubilados, (aunque ese beneficio no alcanzó a todos), o diferentes medidas tributarias que se pusieron en marcha en los últimos dos meses, fueron factores que jugaron a favor del candidato oficialista.
Del lado de la oposición, las principales causa que influyeron para que la candidata de JxC, Patricia Bullrich, quedara en tercer lugar, tuvieron que ver con la dura interna Bullrich – Larreta, en opinión de quien escribe, el principal factor y el permanente ataque al kirchnerismo, un discurso que no cayó bien en el electorado.
En el caso de LLA, jugo en contra el permanente ataque de javier Milei a la «casta política» y «voy a usar la motosierra» entre otros factores, pero termino acordando una alianza con el gremio de los gastronómicos, encabezado por Luis Barrionuevo.
¿Un nueva Argentina?
Pero no todo esta dicho, porque aun faltan 28 días para conocerse el nombre del futuro Presidente de la Argentina. Ahora, Massa y Milei deberán remontar el camino recorrido para capitalizar los votos que no tuvieron el 22 de octubre último.
En el terreno de las hipótesis, es muy posible que los votos que el domingo último fueron para el candidato de Córdoba, el gobernador Juan Schiaretti, sean capitalizados por el peronismo. El mandatario cordobés, hasta el 10 de diciembre, tiene una profunda raíz peronista.
También es posible que Massa capitalice los votos de los radicales díscolos que hoy forman parte de JxC, entre ellos la militancia que acompaña al jujeño Gerardo Morales y, que forman una parte importante del universo de los 6.257.000 votos capitalizados por Bullrich. También un poco más a la izquierda, el electorado que se inclinó por la candidata del Frente de Izquierda de los Trabajadores (FIT), Myriam Bregman.
En tanto que Javier Milei deber`´a tejer nuevas alianzas para capturar los votos del núcleo duro de JxC, refrenciado en Patricia Bullrich y Mauricio Macri.
En definitiva a menos de 24 horas de los comicios generales, la Argentina se encuentra en una difícil coyuntura y quien sea ungido presidente de la Nación el 19 de noviembre, no navegará en un mar de rosas, porque deberá ver la fórmula que permita revertir el lamentable estado de pobreza en la que hoy los argentinos se encuentran sumidos.
Mal que nos pese, sea quien fuere el próximo presidente de los argentinos, de algo estamos seguros, el 30 e octubre se cumplen 40 años del regreso de la Argentina a la democracia y del cierre de un siglo en el que los golpes de estado fueron moneda corriente en el siglo XX (VW).